lunes, 1 de marzo de 2010

El chino de Henning Mankell

A Henning Mankell la literatura lo relaciona con Kurt Wallander, un detective serio y sensible, inteligente e intuitivo, que investiga crímenes inexplicables en los paisajes helados de Suecia. Wallender es un mito para quienes somos aficionados al género negro. Con él hemos “investigado” en Asesinos sin rostro, Los perros de Riga, La leona Blanca, El hombre sonriente, La falsa Pista, La Quinta mujer, etcétera.

Pero Henning Mankell, el escritor sueco que se dio a conocer en España hace ya varios años y que nos enseñó a los lectores las peculiaridades de la sociedad de su país antes de que llegara hasta nosotros el boom de los Milenium, abandona algunas veces a su detective principal e inventa otros personajes para sus obras. Es el caso del libro titulado “El Chino”, una novela en la que, sin dejar de lado el enigma policíaco pero usando maneras y estructuras distintas a las de sus obras más conocidas, Mankell nos ofrece datos fidedignos e ideas generales sobre la gran nación china, su evolución, sus rémoras políticas y el futuro hacia el que avanza.

En un pueblito aislado de Suecia se comete un terrible crimen: los diecinueve habitantes del pueblo son asesinados de forma salvaje durante una noche de enero. La policía acude al lugar de los asesinatos y comienza a indagar. Entre tanto, Birgitta Raslin, una jueza de una ciudad apartada se entera de la noticia y acude al pueblo porque entre los muertos se hallan los padres adoptivos de su madre. En sus particulares pesquisas, descubre cosas que a la policía le pasan desapercibidas.

De pronto la acción se traslada a otro continente, a otro siglo. Mediados del XIX: Entre los chinos que construyen el ferrocarril en la costa oeste de los Estados Unidos hay unos hermanos, que han sido secuestrados en su país cuando buscaban trabajo. Como otros muchos paisanos traídos a la fuerza hasta América, sufren, trabajan y malviven, haciendo un trabajo que supone un peligro constante para sus vidas. Negros, indios, irlandeses, americanos participan también en las tareas, pero el mayor riesgo lo asumen los chinos. Uno de los hermanos, San, conseguirá sobrevivir y regresar a China, donde escribirá sus memorias para que sus sucesores sepan de su experiencia.

Regresamos a la actualidad. La jueza sueca está de baja médica y emprende viaje a China con una amiga. En esta parte del libro, son importantes los diálogos de las dos mujeres y de los personajes que van apareciendo, pues con ellos se filosofa sobre la situación del país en la actualidad, vísperas de unos Juegos Olímpicos, y de lo que fue en los tiempos de Mao. Las dos amigas eran en su juventud admiradoras de la revolución china y están sorprendidas de la evolución del país. El enigma del asesinato es en estas páginas una mera referencia que, sin embargo, el lector no ha de perder de vista para poder sacar sus propias conclusiones.

En la última parte se resolverá el misterio de una forma un tanto distinta a lo que suele ser habitual en el género: no habrá explicaciones del criminal, ni de los policías que llevan el caso. El lector tendrá que ir intuyendo y adivinando a medida que los personajes lo hagan. Así averiguará quién mató a los habitantes del pequeño pueblo sueco y cuáles eran sus razones.

Mi opinión es que Mankell ha querido volcar en esta obra sus conocimientos de Asia y de Africa (él vive parte del año en Maputo, Mozambique, donde gestiona un teatro con fines culturales y humanitarios), sus pareceres y sus elucubraciones personales. Quizás esto suponga un peso adicional a la lectura de quienes acuden a Mankell en su calidad de autor policíaco. Pero es una excelente novela, tan bien trazada y redactada como todas las obras del autor. Y un pretexto para explorar después algún capítulo de la historia de China en los últimos siglos.

16 comentarios:

Unknown dijo...

Me gusta muchísimo este escritor,ahora estoy leyendo PISANDO LOS TALONES,tengo también a la espera LA LEONA BLANCA Y CORTAFUEGOS,no sólo es bueno por lo que cuenta sino por cómo lo cuenta y de la manera que se implica en la sociedad actual.Abrazos

Merche Pallarés dijo...

No lo conocía. Suena muy interesante ese escritor y "El Chino" en particular. Me lo apunto. Besotes, M.

Anónimo dijo...

Nunca he leído nada de él.
Bss

Fernando Manero dijo...

Es una obra que engancha desde el principio, como todas del gran Mankell. Impresionante las descripciones sobre la construcción del ferrocarril, sobre la vida en Cantón, sobre las intrigas de la China que todo lo puede y donde todo es posible. Una lección de historia, de psicología, de humanidad y de intriga de la buena. Mankell me acompaña con frecuencia en los viajes. Es de los pocos autores que permiten sobrellevar vuelos largos. Y es un tipo admirable: lo que está haciendo en Mozambique es más de lo que podíamos imaginar de la voluntad solidaria del yerno de Ingmar Bergman. Mil veces lo prefiero a Largson y sus bidones de gasolina.

Francisco Posse dijo...

Me apunto el nombre del escritor, que tengo que pasar por FNAC; a ver si me engancho.

Saludos

Isabel dijo...

Tal y como cuentas la trama, te dan ganas de ir a comprar el libro ¡YA!. Un beso guapa

José Núñez de Cela dijo...

He leído (prácticamente) todo Mankell, y las novelas sin Wallander son tan potentes y tan atractivas como las del famoso detective. Mankell, además, elabora su discurso mucho más allá de la historia y deja aflorar un compromiso social y político muy claro que, además, refrenda con su vida personal. No tengo nada (dios me libre)contra la moda de la novela negra-nordica, pero me quedo con Mankell sin duda ninguna...
por cierto, la despedida de Wallander, GENIAL

http://jancarti.blogspot.com/2009/11/adios-wallander-adios.html

Un saludo

Anabel Rodríguez dijo...

He leído bastante Menkell, casi toda la serie wallander y algunos spin-off (El retorno del profesor de baile). Tengo pendiente la novela objeto de este post, otra novela ajena a la cuestión policiaca que me ha recomendado mi padre (¿puede llamarse profundidades?) y las dos novelas africanas. No doy a basto.
Creo que Menkell escribe estupendamente (mucho mejor que Larsson, se pongan los demás como se pongan), que te hace profundizar en la sociedad sueca al tiempo que la cuestión policíaca la resuelve tirando casi siempre, de sentido común (lo que es de agradecer).
Besos

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Acabaremos siendo todos suecos... Suecos en España: no estaría mal.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

Es larguisima la lista de libros que pienso leer las proximas vacaciones; espero que me de tiempo para leer todo lo posible.

Besos...!

m.eugènia creus-piqué dijo...

Pues parece que ha de ser distraída la historia Cecilia.

Ciberculturalia dijo...

En todo caso no me lo perderé, es uno de los autores a los que sigo con devoción. Leo todo lo que de él se publica.
Gracias por la referencia.
Un beso

Eastriver dijo...

Conozco las obras emblemáticas de Mankell, están bien. La novela que nos comentas no la conozco y puede resultar interesaante: la entiendo como la aplicación de una técnica narrativa a un tipo de estructura diferente, y es eso que la puede hacer interesante. De cara al verano podría ser una buena idea...

fritus dijo...

He oido hablar muchisimo de el y esta última recomendacion tuya ( lo que veo en esta casa suele ser bueno) lo acaba de convertir en urgente...

un abrazo

Moisés P. dijo...

Vengo del blog de Jose (Ideas idas y venidas) y me encuentro con esta entrada....te puedo asegurar que con Mankell siempre disfruto, y con el chino ni te digo. Hace poco hice una entrada de su última novela, y sentí algo de pena con Kurt Wallander. Me encantan sus novels.
saludos

natalia_paperblog dijo...

Buenos días Cecilia,
Quisiera disculparme, pero no he encontrado otra manera de contactarte que a través de los comentarios. Soy Natalia, de Paperblog. Me pongo en contacto contigo para invitarte a conocer el proyecto Paperblog, http://es.paperblog.com, un sevicio de difusión cuya misión consiste en identificar y dar a conocer los mejores artículos de los blogs inscritos ,que sino, se diluyen entre la masa antes de llegar a los oportunos lectores. "Cecilia en el Balcón" se adapta a nuestros criterios y creo que tus artículos resultarían muy interesantes a los lectores de "Sociedad"
Espero que te motive el proyecto que iniciamos el mes pasado con tanta ilusión. Échale un ojo y Mientras, no dudes en escribirme para conocer más detalles.
Un saludo de todo el equipo, 
Natalia -natalia@paperblog.com
Responsable Comunicación Paperblog